ISO 9001 – Un Sano Remedio para el Todólogo

Cuando diriges una pequeña o mediana empresa, sobre todo si eres el emprendedor, te toparás con una serie de situaciones que quizá nunca imaginaste. Lejos están aquellos años donde comenzaste tú solo con tu negocio. Tú eras todo: administrador, vendedor, encargado de logística… en pocas palabras: un todologo. Hasta que llegó el momento que no pudiste más y debiste contratar personal.

Al inicio, seguramente todo bien, seguías teniendo en control…tus colaboradores eran tus manos y el negocio seguía creciendo y creciendo. Hasta que llegó el momento en que la operación te absorbió tanto que, lo que comenzó como un sueño, se volvió una pesadilla. Empezaste a dedicarle más tiempo al negocio que a la familia, dejaste el sano descanso y sin embargo… simplemente no podías más.

Y te preguntas, ahora ¿qué hago? ¿cómo hacer para que el desarrollo de la empresa sea sustentable? ¡Buenas noticias, te tengo una sugerencia! ¡Ábrete al mundo de ISO 9001! No importa que no quieras certificarte. Existen una serie de prácticas de este estándar internacional, que te ayudarán a delegar funciones que antes sólo tu hacias pero de una forma organizada y planeada. Aquí te dejo unas cuantas:

Y esto sólo es el comienzo. La clave está en hacerlo de forma organizada, planeada y adaptada a tus necesidades. Lo más importante es que ISO 9001 no compromete tus valores institucionales o tus políticas, sino que parte de la forma en que ves tu negocio y te ayuda a estructurar y sistematizar.

Comparte este post :

Entradas relacionadas